sábado, 5 de julio de 2025

Una versión condensada… Pero mágica

En una época en la que ver películas en casa no era tan fácil ni accesible como hoy, el formato Super 8 ofrecía a los aficionados una forma casi mágica de revivir sus escenas favoritas desde el salón de su casa. Y pocas películas merecen tanto ese honor como Superman: The Movie, la inolvidable cinta de Richard Donner protagonizada por Christopher Reeve. La edición en Super 8 no contenía el metraje completo, sino un resumen condensado de unos 17 minutos que reunía momentos clave como el rescate del helicóptero. Era una versión pensada para capturar la esencia del personaje, perfecta para los proyectores domésticos de la época.



Distribuida por sellos como Columbia Pictures, esta edición venía presentada en uno o dos carretes, con una calidad de imagen modesta pero con ese grano y textura cinematográfica que solo el Super 8 podía ofrecer. Las carátulas, a todo color, se han convertido hoy en auténticos objetos de colección.

Edición Super 8 V.O.S.E de Superman: The Movie digitalizada.

Versiones de 400 y 200 pies.

Hoy en día, conseguir una copia de Superman en Super 8 es un pequeño capricho para el coleccionista. Más allá del valor económico, lo que realmente importa es la experiencia. Ver al Hombre de Acero proyectado en una pantalla blanca con el zumbido característico del proyector de fondo es algo especial. Es volver atrás en el tiempo, cuando no existía el streaming ni los Blu-ray, y cada segundo de metraje proyectado era un evento. Para quienes crecimos soñando con volar junto a Superman, tener esta edición es como guardar en casa un pedazo de esa magia. No importa que dure apenas un cuarto de hora: cada plano encierra la promesa de aquel eslogan inolvidable que lo cambió todo en 1978: Usted creerá que un hombre puede volar. Y, digo en mi nuevo libro, aún seguimos creyendo.