Este juego de 1997 para Game Boy es, para muchos, es el peor juego de Superman (sin contar el de Superman Returns de la Game Boy Advance). Pero para mí tiene un bonito recuerdo, ya que fue mi regalo de Reyes de 1998. Todavía lo conservo, e incluso guardo la carta que «envié» a Sus Majestades de Oriente.
Más allá del recuerdo de un nostálgico como yo, hay muy poca historia que contar de este juego basado en la serie de animación de los 90. No se tiene ningún acceso a los poderes de Superman, con la excepción de volar, y la meta de cada nivel es recoger suficientes llaves para poder seguir avanzando.
Hay niveles de acción, otros en los que tienes que ir todo el rato volando y otros en los que vas bajo el agua. Tuvo compatibilidad con Super Game Boy, un accesorio que nos permitía jugar nuestros juegos de Game Boy en la Super Nintendo.